Las cocinas funcionales se caracterizan por tener una distribución orientada al día a día del usuario, intentando adaptar la distribución para que con un mínimo recorrido obtengamos el máximo de opciones para poder desenvolvernos a la hora de realizar cualquier tarea en la cocina.
En los diseños de cocinas modernas es importante tener claro el espacio con el que contamos y adaptarlo al usuario. Los más utilizados son los muebles altos, útiles para tarteras, sartenes, utensilios de cocina, o de limpieza y los muebles altos, usados para vajilla, también podemos contar con muebles auxiliares, como mesas que pueden utilizarse de superficie de apoyo, o mobiliario plegable.
Para poder aprovechar las cocinas funcionales, un elemento clave a destacar es la luz. Potenciando la entrada de luz natural en el espacio, y realizando un estudio de iluminación artificial para los distintos espacios y los distintos usos que se dan en la cocina.
También contaremos con una gama de acabados y materiales con tendencia a los tonos claros, texturas brillantes y algún color vivo que ayudarán a intensificar la luz natural.